martes, 25 de abril de 2017

Ideas para una España con futuro



El Régimen de 1978 ha resultado ser una catástrofe económica y política para la Nación política española. Ha desnacionalizado España y ha generado un sistema económico desindustrializado con un paro crónico altísimo resultado de la entrada en la Unión Europea y de la consiguiente desindustrialización a mayor gloria de Alemania y de Francia.

Se me ocurren unas propuestas que no son nada novedosas en el fondo porque Gustavo Bueno y otras personas a quienes valoro sinceramente hicieron propuestas parecidas para la restauración política de España.

Si utilizamos como hilo conductor para formular tales propuestas la teoría del Estado de Gustavo Bueno, pienso yo que podrían las propuestas que ser presentadas de la manera que sigue:

En la capa basal empezamos estableciendo el trabajo social obligatorio para todos los parados, salida de la Unión Europea y control de los sectores económicos clave por parte del Estado. Apuesta decidida por la energía nuclear y por la extracción de petróleo allí donde se halle. Fomento de la agricultura y del pastoreo. Cese de las subvenciones estatales a sindicatos y patronal. Reindustrialización de España y restablecimiento de la industria pesada y de la minería. Establecimiento del precio de la luz eléctrica con las consiguientes rebajas del precio de la electricidad. Rebaja de impuestos al pueblo.

En la capa conjuntiva se propone la derogación de la Constitución de 1978 y la redacción de una nueva constitución republicana, centralista, presidencialista que incluya las siguientes novedades: 1º Establecimiento de la pena de muerte para los crímenes horrendos. 2º Supresión del Estado de las autonomías y de todos los privilegios forales. 3º Ilegalización de todos los partidos separatistas. 4º Establecimiento de un poder judicial independiente. 5º Supresión de la desigualdad legal entre varones y mujeres existente desde la ley de 2006 de violencia de género. Supresión del Ministerio de la Igualdad. Supresión de toda subvención a entidades privadas. Establecimiento de la libertad plena de expresión en todos los centros de enseñanza. Supresión del delito de odio o de violencia de género, sustitución del matrimonio homosexual por la unión civil. Derogación de la Ley de Memoria Histórica. Establecimiento de la lengua española como única lengua oficial en toda España. Supresión de los delitos contra animales y su sustitución por faltas administrativas. Facilitamiento del desahucio a ocupas e insolventes.

En la capa cortical se propone el severo control de fronteras y el establecimiento del supremo interés nacional del pueblo español primero frente a extranjeros. Stop inmigración musulmana, política de neutralidad armada, servicio militar obligatorio, establecimiento de una industria militar nacional. Expulsión automática e inmediata de ilegales. Bloqueo y cierre de la verja de Gibraltar. Apoyo a Israel. Salida de la Unión Europea.

Entendemos que estas modestas medidas suponen un cambio de rumbo en la dirección política de España y que contribuirán seguramente a la eutaxia política de España.

lunes, 10 de abril de 2017

Carmen Chacón

Carmen Chacón ha muerto. Nació en 1971. Tenía pues 46 años. La muerte de un hombre es algo terrible y lamentable.
Para mí Carmen Chacón el interés que en mí despierta es el interés político. Si tenemos que hacer una evaluación de su figura, ello es por su dedicación a la política, enclasada en la clase política del Régimen de 1978.
Fue militante del PSC, ese partido socialdemócrata charnego útil para los separatistas, tonto útil de la secesión catalana. Carmen Chacón a propósito de tal asunto viajó a Quebec a estudiar eso de los referendos separatistas, porque Carmen Chacón no fue nunca una patriota española. Ella era toda una experta en eso, en el referéndum de separación, en la fragmentación de la Nación Política Española. Cuando el malnacido charnego Pepe Rubianes dijo eso de la puta España, Carmen Chacón lo defendió y lo apoyó. Esta era la catadura moral y política de Carmen Chacón.
Cuando el infame Zapatero ocupó la presidencia del Gobierno de España, la nombró ministra de la Vivienda primero y luego ministra de defensa en plan progre-feminista. Eso fue todo. Un acto de propaganda típico de la actual izquierda socialdemócrata, vamos, el progresismo actual. Pura imagen y políticas lesivas siempre para el interés nacional. En 2011 intentó competir para controlar el PSOE, pero perdió por 22 votos frente a Rubalcaba. Se convirtió en una privata y se dedicó a sus asuntos particulares viendo su clamoroso fracaso. Incluso se dio de baja en el PSC y se vino a vivir a Madrid. Su oportunismo nunca conoció límites o barreras.
Ahora vaga por el Averno. R.I.P. Tempus fugit. Calificación de Carmen Chacón: política mediocre y de poca utilidad para la Nación Española. Eso es todo.

miércoles, 22 de marzo de 2017

El padre Juan de Mariana y su defensa del tiranicidio

En homenaje al Padre Juan de Mariana, y no pudiendo asistir al Primer Congreso sobre el Padre Juan de Mariana, que se está celebrando hoy en Talavera de la Reina, procedo a escribir esta pequeña nota pedagógica sobre un punto importante del pensamiento político del Padre Juan de Mariana.

         El padre Juan de Mariana es el más destacado monarcómaco católico. Es un pensador de la Contrarreforma. Su doctrina del tiranicidio, así como su idea de potenciar el papel político de los obispos es una idea en la que coincide con otros jesuitas de la contrarreforma.

         Nace en Talavera de la Reina (1536) y muere en Toledo el 16 de febrero de 1623.

         En su De rege et regis institutione (1599) es en donde Mariana formuló su teoría del tiranicidio que defendió como algo necesario. En el Libro I. Cap. V queda planteado el tema del tiranicidio. Distingue Mariana entre rey y tirano. A continuación se plantea el problema de “si es lícito matar al tirano” (cap. VI). Comenta los hechos relativamente recientes de Francia en 1588: el asesinato del duque Enrique de Guisa, jefe del partido católico por parte del rey Enrique III de Valois y el asesinato de éste por parte de Jacobo Clemente y la consiguiente muerte del tiranicida.

“Así murió Clemente, considerado por los más como una gloria eterna de Francia, cuando sólo contaba veinticuatro años. Era de modesto ingenio y de cuerpo no muy robusto, pero algún impulso superior aumentó sus fuerzas y vigorizó su alma” (73-74) [Los números entre paréntesis que siguen a las citas remiten a las páginas de “La dignidad real y la educación del rey”. Introducción y traducción de Luis Sánchez Agesta. Madrid, 1981.

         Mariana defiende el tiranicidio porque el pueblo es el titular del poder político. Mariana defiende que es necesario el tiranicidio cuando no existen otros medios para conseguir que el tirano abandone el poder político. El problema es cuando el rey se convierte en tirano. Teniendo un origen legítimo su poder, sin embargo, por sus actos este poder político deviene ilegítimo. Cuando no es posible que los estamentos del reino hagan nada porque el tirano bloquea sus movimientos o sus reuniones, cabe recurrir a la acción privada, individual, particular cuando no es posible que el cuerpo de la Nación actúe. Prohíbe Mariana la muerte por envenenamiento del tirano porque entiende que así el tirano se mataría a sí mismo (Cap. VII.).

         Es que ocurre que la obediencia es voluntaria. El poder político del gobernante deriva su legitimidad y legitimación por el consentimiento voluntario de los gobernados. La titularidad del poder político le corresponde a la sociedad política, no al rey. Al rey le corresponde el ejercicio del poder. Mariana es partidario de la monarquía limitada por las instituciones medievales, como ocurría en Aragón con sus Cortes, que servían para defender las leyes. El poder real está así limitado. No está por encima de las leyes. Princeps non est solutus legibus. El rey está sometido a las leyes, que emanan de la república y no del mismo rey.

22 de marzo de 2017.

jueves, 16 de marzo de 2017

La basura de Podemos

En Leganés, la profesora Alicia Rubio, directora del IES Peridis ha sido objeto de escrache por parte del vulgo estudiantil convocado por Podemos. Su crimen es criticar la ideología de género. Ultimi barbarorum. La ideología de género es falsa y es ridícula: divide a la sociedad en sexos y no en grupos sociales. Sostiene que varones y mujeres formamos dos clases sociales, donde los varones somos violadores, maltratadores, la clase dominante del heteropatriarcado, otra majadería progresista decadente y nihilista. Sostiene además que género y sexo son lo mismo y además sostiene que la diferencia sexual es convencional, relativa y puede ser variada. Uno si se siente mujer es mujer eo ipso y si se siente varón es varón eo ipso por propia decisión. Olvidan que el sexo viene determinado de manera inevitable e indeleble por los cromosomas XX en el caso femenino y XY en el caso masculino. El sexo no es como el color de los ojos o el color del pelo. No puede cambiarse a voluntad. Las operaciones de cambio de sexo son disfraces. La transexualidad es una enfermedad mental similar al trastorno mental consistente en afirmar uno de sí mismo que es Napoleón y que por ello todo el mundo debe llamarle Napoleón y ponerle la cara de Napoleón por el deseo o voluntad libre del sujeto individual. No hay niños con vulva ni niñas con pene. Eso son aditamentos hechos por seguirle la corriente a quien afirma eso. La disociación mental respecto al sexo de cada cual es una enfermedad psiquiátrica. Dejémonos de tonterías. Mi solidaridad con la profesora Alicia Rubio y con su libertad de decir lo que le plazca y de pensar como le venga en gana y mi desprecio absoluto a esos alumnos idiotas y manipulados por Podemos que han salido en Leganés a protestar contra la profesora. Abajo el progresismo, abajo Podemos, abajo la ideología de género.

lunes, 6 de marzo de 2017

Basura eusquérica

La crisis del Estado Español, de España, de la Nación Española se manifiesta en la impunidad y en la desenvoltura con que sus enemigos internos operan. El Estado de las Autonomías era y es un mecanismo de voladura controlada y lenta pero sostenida de España. El otro día una cretina eusquérica en ETB, la TV dialectal eusquérica vasca se dedicaba por una vez más a difamar a España y a los españoles y una cateta y paleta eusquérica, Miren Gaztañaga decía que los españoles somos paletos, atrasados, catetos...Mira quién lo decía, una eusquérica. Pero ¿Qué me va a decir a mí, a un español bien nacido hispanohablante, una pobrecilla dialectal que habla una lengua sintética, inventada que sólo entienden cuatro gatos? No se puede ser alguien grande e importante hablando lenguas ridículas. Yo estoy en contra de que los dialectos sean subvencionados, fomentados e impuestos al pueblo. Son para conseguir convertir a los españoles en acémilas, en bestias de carga. Lo único que cabe añadir es que los necios han triunfado y se dedican a obligar a todo el mundo a pensar en necio para darles gusto a ellos, a los terroristas, a los separatistas, a los españoles malnacidos.

lunes, 30 de enero de 2017

El progresismo imbécil valga la redundancia

La elección por el vulgo de Donaldo Trump ha demostrado o puesto aún más de relieve si cabe la imbecilidad de los progresistas y demócratas fundamentalistas. Sólo saben balbucear sobre los derechos humanos y sobre la democracia desde su perspectiva idiota y débil mental, infantil. Viven en la estupidez socialdemócrata del pensamiento Alicia como vivía Zapatero hace unos años en España de nefasta memoria.
No se dan cuenta de que el realismo político es lo que tiene que regir la gobernación del Estado y que el interés nacional del pueblo está por encima de los derechos humanos formulados formal y abstractamente. Un Estado tiene una cosa que se llama soberanía y que consiste en el control de la capa cortical, la conjuntiva y la basal. El control de las fronteras, el control de la inmigración forman parte irrenunciable de la soberanía de un Estado y no admiten ser puestas en cuestión por intelectuales progres o por mediocres demagogos populistas embrutecidos por su ignorancia, su criminalidad y su demagogia en la que a veces incluso hasta llegan a creer embobados por el poder que la ideología (M3) puede llegar a ejercer en su mediocre y débil subjetividad (M2). Entonces determinados planteamientos políticos llevan a estos sujetos a afirmar tesis absurdas y a tener comportamientos dignos de ser analizados por parte de un psiquiatra. Es cuando yo digo que Fornicarmena, por poner un caso muy famoso en España, necesita ayuda profesional. Presumen de demócratas y luego se creen con la superioridad moral que les da su estúpida y falsa ideología para dar lecciones de humanismo, armonismo  y derechos humanos. Son ágrafos e incapaces de la menor reflexión. Encima apoyan a la ETA y se ponen a despotricar contra Donaldo Trump, el héroe de nuestro tiempo.

viernes, 27 de enero de 2017

El filósofo y el político




Según Platón son filósofos aquellos que pueden alcanzar lo que se comporta siempre e idénticamente del mismo modo. El no-filósofo, sumergido en la doxa, deambula por la multiplicidad de los fenómenos. Pasa su vida en la doxa. El filósofo ama toda la realidad, esto es, las Ideas. Ama el saber desinteresadamente, amasa conocimientos y ama la verdad. Será morigerado. No necesitará en ningún caso ser controlado y dirigido por otros.

El filósofo no tiene miedo a la muerte. Aprende con facilidad. Está dotado de buena memoria. Es valiente.

Los filósofos más razonables, más racionales y rigurosos son inútiles para la plebe. El filósofo no debe ir suplicando al vulgo que le permitan gobernarlos por su bien. De todos modos lo más terrible que sobreviene a la filosofía es el desprestigio que tiene debido a la conducta y calidad teórica de los que dicen que se ocupan de la filosofía. El desprestigio de la filosofía proviene de aquellos que dicen dedicarse a ella. Frente al filósofo está el filodoxo, el amante de las opiniones o filotheamón, el amante de los espectáculos, vamos, el sofista, que no hace otra cosa que enseñar lo que la multitud prefiere , las convicciones del vulgo y a eso los sofistas lo llaman ciencia. La multitud no es filósofa.

Según Platón la autoridad política debe fundarse en la verdad, esto es, en la filosofía porque el saber y el poder político deben ir unidos si queremos un gobierno o un Estado eutáxico. La fuerza está subordinada a la ciencia. El verdadero filósofo es el verdadero hombre de Estado. Sólo el filósofo cuenta con la legitimidad política derivada de su saber absoluto e indubitable, sistemático, objetivo, científico, racional.

En el “Político” Platón señala que la función política exige aptitudes especiales. La ciencia política es la ciencia real, la ciencia del mando, epitaktiké, es una tekhné. La ciencia de la distinción es la base de este saber político, critiké tekhné la llama Platón. Sólo una élite filosófica posee este saber.

El buen gobierno será pues el gobierno de la razón y de la ciencia. La superioridad de la ciencia sobre la legislación queda así establecida por Platón. El gobierno perfecto no requeriría leyes, sino ciencia. La ciencia es el único criterio válido para establecer un gobierno perfecto.

Como tales situaciones perfectas no existen, resulta entonces que la ley es la única garantía de buen gobierno en los gobiernos imperfectos. En este terreno el interés público debe prevalecer siempre sobre la voluntad arbitraria del individuo. Leyes, ÇX, 923 a-b.

En las Leyes Platón sostiene que el régimen mixto de monarquía y de democracia sería el régimen ideal. Un tirano joven aconsejado por un viejo sabio y prudente sería la mejor dirección política.

No renuncia Platón nunca al gobierno del saber de todos modos. El titular de la soberanía es un Autócrator, un señor absoluto.  No hay orden político o legal que sea superior al saber absoluto. Si hay verdad absoluta, hay poder absoluto.

Este gobierno del saber determinó en la República de Platón la idea de una poesía de Estado y de una música de Estado determinadas y establecidas de una vez para siempre.

Por eso deben ser los filósofos quienes gobiernen el Estado. El gobierno ideal platónico es una sumisión total al control filosófico.