viernes, 13 de diciembre de 2024
Mens, Hyle, Deus
David de Dinant. [Mens, Hyle, Deus].
Dico igitur tria esse in anima, scientiam et intellectum et voluntatem horum autem unumquodque est passibile. Dico passibilem scientiam esse sensum, pasibilem vero intellectum ymaginationem, passibilem vero voluntatem desiderium seu affectum. Nam sensus nihil aliud percipit quqm passionem quae fit in instrumento sensus a re sensata. Quoniam vero ymaginationem impossibile est fieri nisi ex praexistente sensu, manifestum est queo ymaginatio nihil aliud percipit quam signum vel vestigium pasionis sense.
Así pues digo que hay en el alma tres facultades: el conocimiento, el intelecto y la voluntad, ahora bien, de éstas una es paciente. Digo al conocimiento paciente sentido, al intelecto paciente imaginación, a la voluntad deseo o afecto. Puesto que el sentido no percibe otra cosa que pasión que se produce en el instrumento del sentido por parte de la cosa sentida. Porque es imposible que la imaginación no se produzca sino de una sensación, preexistente, es manifiesto que la imaginación no percibe otra cosa que el signo y el vestigio de una pasión sensible.
Sed nec affectus potest fieri in anima nisi patiatur cor per immutationem sistole vel diastoles, sive secundum calefactionem vel frigifactionem sanguinis sive spiritus qui est in corde . Igitur nullum trium predictorum posse fieri nisi a corpore, quando nullum horum fit nisi cum passione corporis.
Pero ni la afección puede producirse en el alma sino por una alteración de la sístole o de la diástole, o según el calentamiento o enfriamiento de la sangre o del espíritu que está en el corazón. Así pues ninguna de estas tres facultades puede operar sino por el cuerpo, cuando ninguna de ellas actúa sino con la pasión del cuerpo.
Quaerit autem Aristoteles utrum aliquid de anima separabile sit a corpore.
Subinsunt aut de anima nihil esse separabile, aut non. Aliquid est separabile in anima a corpore in esse noym quod nos mentem dicimus. Unde manifestum est mentem esse quoe impassibilea sunt. Dico autem queo quemadmodum se habet corpus et hylem passiva, ita et mens passiva.
Aristóteles pues se pregunta si alguna parte del alma es separable del cuerpo.
Esto significa que o bien en el alma no hay nada separable o al contrario. Algo es separable en el alma del cuerpo esencialmente a lo que llamamos mente. De donde es manifiesto que la mente es lo que es impasible, en la que hay tres momentos, que son impasibles. Afirmo pues que así como el cuerpo está en la materia, así el alma está en la mente. Si así pues el cuerpo y la materia son pasivos, así el alma y la mente son pasivos.
Dico autem quod una sola est mens, multae vero animae, et una sola hyle, et multa vero corpore. Cum enim sole pasiones, hoc est accidentia sive proprietates, faciant differentiam rerum ad se invicem, necesse est unum solum esse id que nulli passioni subiectum est, cuiusmodi sunt mens et hyle. Ea ver quae passiva sunt necesse est esse multa, et quod proprietates, quae in ipsis sunt, faciunt unius cuisque differentiam ad alterum cuiusmodi sunt corpora et animae. Manifestum est quod una sola est mens et una sola hyle.
Así pues afirmo que sólo hay una mente y que las almas son múltiples y que la materia es una y los cuerpos son múltiples. Como en efecto las pasiones, esto es, son accidentes o propiedades, hacen las diferencias de las cosas, recíprocamente es necesario que haya un único sujeto que no sea ninguna pasión de cuyo género son la mente y la materia. En cuanto las cosas capaces de padecer es necesario que sean múltiples y que las propiedades que en ellas mismas están las diferencien entre sí a unas de otras, de cuyo género son los cuerpos y las almas. Por lo tanto, es manifiesto que sólo hay una mente y que sólo hay una materia.
Quaerendum autem utrum mens et hyle unum sint aut diversa. Cum igitur sola passiva differant ad se invicem, videtur mentem et hylem nullo modo differe, cum neutrum eorum sit subiectum passioni. Rursus autem quemadmodum passivus intellectus, qui est in anima, comprehendit solum corpus, ita et impassibilis intellectus, qui est in mente, comprehendit solam hylem. Manifestum est etiam quod passibilis intellectus, hoc est imaginatio, non comprehendit esse nisi assimilletur rei sense nam hoc secundum naturam.
Ahora bien, es necesario preguntarse si la mente y la materia son una sola cosa o son diversas cosas. Puesto que solamente las cosas pasivas se diferencian entre sí, parece que la mente y la materia no se diferencian en modo alguno, no siendo ninguna de ellas sujeto paciente. Pero, por el contrario, lo mismo que el entendimiento pasivo que está en el alma comprende solamente el cuerpo, así el intelecto impasible, que está en la mente, comprende solamente la materia.. Está claro que también lo que el intelecto pasivo, esto es la imaginación, no comprende, pues esto es según su naturaleza, el ser sino por la asimilación de las sensaciones.
Per simile vero videtur quod nec impassibilis intellectus possit apprehendere hylem nisi habeat similitudinem cum ea, auto ei sit idem. Non autem potest esse et similis, cum similitudo non sit nisi eorum quae passiva sunt, et sunt subiecta eidem passioni, cuiusmodi sunt duo alba aut duo nigra. Ex hiis ergo colligi potest mentem et hylem ídem esse. Huic autem assentire videtur Plato, ubi dicit mundum esse deum sensibilem. Mens enim, de quia loquimur et quam unam dicimus esse eamque impassibiliem nihil est quam deus.
De manera similar no parece que el intelecto pasible pueda aprehender la materia ni que tenga similitud con ella o bien que sea idéntico a ella. No puede en cambio pues serle similar, porque no hay semejanza entre las cosas que son pasivas, y son sujetos de pasión de cuyo género como es el caso de dos cosas blancas o dos cosas negras. De esto se colige entonces que la mente y la materia son lo mismo. Así pues parece Platón estar de acuerdo con ello, cuando dice que el mundo es un dios sensible. La mente pues, de la cual hablamos, esa que decimos que es una e impasible, no es otra cosa que Dios.
Si ergo mundus est ipse deus praeter se ipsum perceptibile sensus, ut Plato et Zeno et Senopahes et multi alii dixerunt, hyle igitur mundi est ipse deus, forma vero adveniens hyle nihil aliud quam id, quod facit deus sensibile se ipsum. Nam quantitas, ut ait Aristoteles, primum est adveniens hyle et fit corpus, corpori vero advenit naturalis motus, et fit elementum. Cum enim hyle vi sui naturae sicut imperceptibile et immobile, sneus tamen recipit magnitudinem et motu in ea.
Si por lo tanto el mundo es el mismo Dios sin que sea perceptible por los sentidos, como han dicho Platón, Zenón, Jenófanes y como muchos otros dijeron, entonces la materia del mundo es Dios mismo y la forma que adviene a la materia no es otra cosa que lo que hace sensible a Dios mismo. Puesto que la cantidad, como dice Aristóteles es la materia que adviene y que hace cuerpo al cuerpo y hace el movimiento natural y deviene elemento. Ahora bien aunque el sentido recibe la materia por su propia fuerza natural como imperceptible e inmóvil, no obstante recibe la magnitud y el movimiento que están en ella.
Manifestum est igitur unam solam substantiam esse non tantum o,mnium corporum, sed etiam animarum ómnium et eam nihil aliud esse quam ipsum deum. Substantia vero ex qua sunt omnia corpora dicitur hyle, substantia vero ex qua sunt omnes animi dicitur ratio sive mens. Manifestum est ergo deum esse rationem ómnium animarum et hylem ómnium corporum.
Es evidente pues que sólo hay una única substancia no sólo de todos los cuerpos, sino también de todas las almas y que esta substancia no es otra cosa que el mismo Dios. La substancia ciertamente de la que se dice que son todos los cuerpos, la materia, substancia de la que son todas las almas, razón o mente. Es claro que entonces Dios es la razón de todas las almas y la materia de todos los cuerpos.
Noticia sobre David de Dinant
Noticia sobre David de Dinant.
David de Dinant nació en 1160 en Dinant, Bélgica o en Dinan, Bretaña. Murió en 1217, en Mean, Havelange Bélgica. Todo esto es incierto, claro está. Combatido acremente por Santo Tomás de Aquino y por Alberto Magno. Fue condenado en 1210 y se prohibió su lectura en la universidad de París en 1215. Su obra se perdió y sólo quedan unos fragmentos de sus Quaternuli recuperados en época reciente. Fue influido por Alejandro de Afrodisia, Escoto Eriúgena, por Avicebrón y por Amaury de Chartres o Amalarico de Bene (1150-1206).
Afirmó que el mundo es Dios, que la materia del mundo es Dios y que la forma que la materia cobra no es otra cosa que el modo en que y como Dios se hace accesible a la sensación. Existe sólo una substancia, no sólo de todos los cuerpos, sino también de todas las almas o espíritus y ella no es otra cosa que Dios mismo. De ahí se sigue evidentemente que Dios es la materia de todos los espíritus y la materia de todos los cuerpos. Amalarico de Bene fue un teólogo que fundó una secta religiosa panteísta, los amalricenses. Esto influye en David de Dinant. Fue condenado por la Iglesia en 1210. Decía que Dios era la Hyle, la materia prima, así como que había identidad de mente y materia.
“Si el primer artífice y el primer artefacto producido [la materia] son lo mismo, entonces lo mismo podría producirse a sí mismo…Pero eso que se produce a sí mismo, se basta a sí mismo y por eso se produce siempre a sí mismo , de donde el devenir es siempre y no es más en el ser. De donde no es más en el hacer, y si el primer factor se produce a sí mismo de ahí no produce más a sí mismo”. Super II Sententiam dist. 1.a. art. 5. Dios se identifica con su obra producida por sí mismo. Aquí entra en juego la univocidad del ente. David de Dinant rompe con la ontoteología tradicional desembocando en el materialismo. Se sostiene la universalidad del hilemorfismo, idea que proviene de Avicebrón.
Hay una identidad entre mente y materia y Dios. No es la materia tanto el fulcro central de pensamiento de David de Dinant cuanto la mente. La mente es el Ego Trascendental (E), no es un ego psicológico, individual. Se trata de un intelecto o entendimiento que es una potencia cosmológica y ontológica, más que psicológica y noética. Intellectus impassibilis, una parte del alma que está fuera de nosotros. Recibe sin padecer, sin ser transformado o afectado. La experiencia de la materia de la propia y misma posibilidad y capacidad de ser afectado, la pura capacidad de recibir una forma cualquiera, de ser afectados por parte de cualquier contenido sensible y cognoscitivo. O, mejor dicho, al mismo tiempo, a la vez es toda capacidad receptiva y de padecer la forma. Nosotros somos capaces de tener experiencia de nuestra propia receptividad, de ila materia. Tenemos entendimiento pasivo, posible. Intellectus passibilis.
Esta afección sin padecer ni transformarse la recibimos de nosotros mismos o de cualquier cosa de la que seamos idénticos, de la que difícilmente podremos afirmar que sea yo en el sentido en el que lo decimos de nuestras sensaciones y afecciones. David de Dinant afirma que la mente en sí misma recibe el nombre de materia, Hyle. O bien la Hyle, la materia es llamada con el nombre de mente. Experiencia del cuerpo, experiencia de la mente, que es el lugar en el que la mente comprende a la materia. No se identifica la mente con el cuerpo. ”Si la materia del mundo es Dios, la forma que adviene a la materia es Dios, que produce algo sensible siempre.” El alma, la mente, tiene experiencia de la propia materia, de su propia capacidad de ser afectada por la forma, Dios, que se ofrece a los sentidos.
Mente, materia, Dios.
David de Dinant es un gran conocedor de Aristóteles. Su obra Quaternuli, fue condenada en 1210 en París junto con los escritos de Amalarico de Bene. La substancia común a todos los seres corpóreos e incorpóreos es la materia prima, Dios. Tenemos que la Mente, la Materia y Dios son lo mismo.
La materia prima es pura potencialidad, es anterior a toda determinación y a toda forma poseyendo por tanto las características de inmortalidad, indivisibilidad y eternidad. Dios es idéntico a la materia prima en cuanto ilimitado y sin forma.
Las formas diversificantes son para David de Dinant sólo apariencias sensibles, superficiales en cuya raíz está el elemento material idéntico para todas las realidades.
jueves, 5 de diciembre de 2024
Nota sobre ontología general materialista
Nota sobre la ontología general materialista de Gustavo Bueno.
En los Ensayos Materialistas (1972) Gustavo Bueno Martínez estableció su ontología materialista dentro de un sistema filosófico al que denominó Materialismo Filosófico. En esta obra Gustavo Bueno reivindica la ontología tradicional pues es el contenido principal de la filosofía materialista. También vamos a utilizar para completar su doctrina su última obra: El Ego Trascendental, 2016.
Toda filosofía verdadera es materialista. El Ego Trascendental (E) se desconecta del mundo de los egos psicológicos y se convierte así en una Idea universal. La Materia M está definida como pluralidad infinita y radical de partes extra partes y como codeterminación. Los egos se relacionan entre sí por la Materia, M. El Ego trascendental “Es una idea lógico material (gnoseológica) simbolizada por E, que se interpreta como el enlace entre el Mundus adspectabilis Mi, totalizado por E, y la materia ontológica general (M)” 2016, El Ego trascendental, inicio, Prólogo Galeato. El campo de la filosofía materialista es el Mundo Mi, el Universo y sólo en función de él a la Materia Ontológico General.
Hay dos planos de la ontología materialista, el plano de la Ontología General y el plano de la Ontología Especial. La ontología general niega el cosmos, el cosmismo, el mundo, el mundanismo. Ello deriva de la Idea ontológico general de Materia definida negativamente como negación radical y positivamente como pluralidad indeterminada, infinita. No todo está vinculado con todo. Esto es lo que significa la symploké, término tomado de Platón y que figuraba en el Sofista y que también utilizó Demócrito anteriormente.
El Mundo está constituido por la symploké de los Tres Géneros de Materialidad. (M1, M2, M3) que nos remite a la Materia general (M) como espacio de la ontología general. La Idea de Materia no es un concepto genérico abstracto. La Idea de Materia se predicará trascendentalmente de los Géneros de Materialidad y por tanto, incluirá formalmente la conciencia predicativa E. Es el Ego Trascendental que sólo puede darse en la intersección de los tres géneros de materialidad especial. M es un concepto crítico regresivo. M es el término de un proceso regresivo. De la Idea de Materia tenemos un conocimiento negativo, dialéctico. Partimos de la materia cósmica, mundana. El análisis de la materia es un análisis autocontextual. Es M el resultado de la relación de la materia cósmica consigo misma. El análisis autocontextual de la materia es necesario puesto que sólo existe la materia. En una ontología materialista la cosa tiene que ser así puesto que fuera de la materia no hay nada. La materia se analiza desde la materia. La materia se analiza a sí misma. La ontología general tiene como objeto la materia, M y consiste en el análisis de la Idea general de Materia (M).
No se puede pensar la Materia fuera de la materia cósmica, del Mundo, {M1, M2, M3}. La Idea de Materia ontológico general (M) sólo puede entenderse en el contexto del Mundo Mi (Mi = {M1, M2, M3}) Idea que ha sido constituida dialécticamente a partir del regressus de ese mismo universo. Cuando hablamos de Mundo o universo hablamos de la omnitudo realitatis. La Idea de Materia procede del Mundo (Mi) debe ir acompañada por E, Ego, conciencia filosófica, Ego Trascendental en suma. El Ego Trascendental no es en extensión una entidad distinta de la reunión de M1, M2, M3. El Ego lógico es quien pone esa reunión.
El primer postulado de la ontología general materialista es PI E= (M1, M2, M3). El postulado PI´ es E⸦ (M1U M2 U M3) ˄ (M1U M2 U M3) ⸦ E. (M1U M2 U M3) define a M como Mundo o Materia ontológico-especial. E=Mi significa que el Ego es igual al Mundo, la identidad entre el Ego Trascendental y el Mundo. La Idea de Materia ontológico-general M sólo puede comprenderse regresivamente a partir de sus contenidos M1, M2, M3. Eso pasa por la mediación de E. Luego E=M.
Mi, es el mundo, el universo. Mi {M1, M2, M3}
El Postulado II afirma que el mundo Mi está incluido en la Materia ontológico general. P.II (Mi⸦M). El Postulado II´ P.II´ Es como sigue (M1 ⸦ M) V (M2 ⸦ M) V (M3 ⸦ M).
Los géneros de materialidad de Mi están incluidos en M. Mi⸦M.
El primer contexto de la Idea de Materia ontológico general M 1= [M, E].
Segundo contexto de la Idea de Materia ontológico general
M 2= [M, Mi].
La conexión (E, M) aparece a través de la conexión E= (M1 U M2 U M3) El Universo (M) es sólo uno. No hay múltiples universos ni tampoco todos o infinitos. En los Ensayos M se definía en función de E pero de forma afirmativa E=M y no de forma negativa M= ¬E= ¬M. Ergo E=Mi.
{E= (M1 U M2 M3) = Mi} ˄ {¬E={¬M1 U ¬M2 U ¬M3)= ¬M}.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)