domingo, 26 de junio de 2011

El perroflautismo

Diógenes el Cínico, el Perro se hizo perroflauta y perroflautista por razones éticas. Denunciaba la sociedad esclavista y democrática ateniense y decidió por lo tanto vivir como un perro, mitad de manera salvaje y mitad de manera doméstica y social. Estaba en la sociedad ateniense o griega pero de manera marginal y anticonvencional.
Tenemos mucha gente cínica en el sentido de Diógenes y de Crates en Madrid....Ahora tienen una ideología viscosa, Alicia procedente de la putrefacción de la socialdemocracia. Viven como Diógenes en la calle y realizan una protesta política contra el régimen representativo, exigiendo vanamente que éste se convierta en democracia. Pero es que la democracia es el régimen representativo: elecciones con sufragio universal, regla de la mayoría y partidos políticos. La democracia es Estado de Partidos, ergo es oligarquía. Esto ya lo sabían los antiguos y les parecía que tal forma era el régimen permixtum, ideal. Sin embargo, los perroflautas contemporáneos exigen otra forma de democracia. No sabemos cómo sería esta nueva democracia según sus representaciones. Pretenden aniquilar en España el Régimen de 1978 y sustituirlo por otro. En su lista de reivindicaciones aparecen ideas socialdemócratas, ecologistas, comunistas, feministas.....Eso es lo que ellos entienden por democracia. Nivel teórico nulo, como el que Marx atribuía a Bakunin en su carta a Bolte: "Bakunin es una nulidad en lo teórico". Al final, lo único que han conseguido es alterar el orden público y atraer a los curiosos que se acercan a la Puerta del Sol en Madrid en busca de algo exótico y novedoso en lo político. Pues nada nuevo bajo el Sol de la Puerta del Sol. Sólo mugre y parásitos. El cinismo antiguo desembocó en mugre y en marginalidad,  igual que el movimiento perrofláutico actual. Encima tienen connivencias con la ETA y desprecian a España y a la bandera. Son cosmopolitas, indefinidos y marginales. Son una fuerza social y política lumpemproletaria apta para el combate con la derecha -que para eso los cuida Rubalcaba- y resistentes durante muchos días a las pulgas y ácaros. El perroflauta es un ser degenerado, lleno de vicios y de molicie. En él no hay afan de saber ni de reflexionar. Se encuentra a gusto llevando su vida perruna. Es feliz en medio de la mugre y de la cochambre y desprecia el Régimen representativo. Los perroflautas creen que con su caos ideológico contribuyen a cambiar el mundo, pero no es así....El mundo sigue por otros derrroteros que no marcan ellos y que transcurre con independencia de sus actos o de sus insultos o de su alteración del orden público. Habrá más motines perrofláuticos, pero no pasará nada destacable en los próximos meses, creo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario